Te lanzamos una pregunta de trivial: ¿Dónde tuvo lugar el primer servicio regular de helicópteros de pasajeros del mundo? La ruta era Liverpool-Wrexham-Cardiff y los pasajeros pagaban desde 1 libra por un billete sencillo hasta 5 libras y 10 chelines por un vuelo de ida y vuelta a través de Gales y el Wirral, con un tiempo de vuelo de 2 horas. El plan resultó totalmente inviable desde el punto de vista económico y sólo duró un año, de 1950 a 1951, pero es una prueba del espíritu de innovación que ha impulsado lo ha la fama mundial. Dos de los mejores clubes de fútbol del mundo, el Liverpool y el Everton, tienen su sede aquí, los miembros de la que posiblemente sea la mejor banda de la historia, los Beatles, proceden de Merseyside y en muchos otros campos de la cultura y más allá, ha dejado su huella. Por eso no es de extrañar que aquí se encuentran algunos de los mejores vuelos en helicóptero del país.

Esta ciudad saltó a la fama como puerto industrial, pero desde el declive de la industria naviera, la historia de la ciudad ha sido la de la reinvención. Los muelles ribereños se han reconvertido en instalaciones comerciales y de ocio, se han rehabilitado bodegas históricas y el turismo ha sustituido a la industria pesada como uno de los mayores empleadores de la ciudad. Ahora tú también puedes reinventarte convirtiéndote en piloto de helicóptero, donde se ofrece enseñanza especializada a personas de toda índole. Por supuesto, aprender esta actividad no es para todo el mundo, pero te garantizamos que hacer un viaje como pasajero en una de estas increíbles máquinas superará tus expectativas, tanto si te consideras un aviador experimentado como si no.

¿Dónde hacer un vuelo en helicóptero por Liverpool?

El aeropuerto de Liverpool Speke fue rebautizado como aeropuerto John Lennon en honor del líder de los Beatles en 2001. Está situado en la orilla norte del estuario del Mersey, y alberga una escuela de helicópteros que realiza los vuelos de placer y las clases de prueba o bautismos en la zona.

• Alrededores del aeropuerto: Al elevarse hacia el cielo desde el aeropuerto John Lennon, obtendrás vistas de 360º de los alrededores. El estuario del Mersey, en su parte más ancha, es una extensión de fangos en marea baja y un animado canal cuando está lleno. Al otro lado del estuario verás la península de Wirral y el condado de Cheshire, mientras que el horizonte se encuentra entre el aeropuerto y el Mar de Irlanda.

• Estadios de fútbol: Cuesta creer que dos de los estadios de fútbol más importantes del Reino Unido -Anfield, del Liverpool FC, y Goodison Park, del Everton FC- estén a menos de un kilómetro el uno del otro. Pues bien, ver para creer, y no te quedará ninguna duda al sobrevolarlos en helicóptero. Entre los dos pueden albergar a casi 100.000 espectadores, pero tú tendrás los mejores asientos del lugar.

• Otros estadios deportivos: No sólo de fútbol vive esta ciudad, las carreras de caballos y el críquet también son muy apreciados. En el hipódromo de Aintree se celebra el Grand National, la carrera de saltos más importante de Europa y conocida como la mayor prueba de caballos y jinetes del mundo. El Sefton Park Cricket Ground se encuentra dentro de un parque público mucho más grande, cuyos jardines, conservatorio con cúpula de cristal y monumentos lo convierten en un lugar popular para el ocio.

• Knowsley Hall & Safari Park: A las afueras de la ciudad se encuentra Knowsley Hall, una casa señorial georgiana rodeada de extensos terrenos. Parte del terreno está dedicado a un parque safari donde los visitantes pueden observar depredadores como leones y tigres junto a jirafas, rinocerontes y suricatas.

• Catton Hall: Esta casa señorial se encuentra al otro lado del estuario, en la zona rural de Cheshire. Tomar un vuelo aquí no es sólo una excursión panorámica, es también un viaje a un fantástico centro de aventuras al aire libre donde puedes pasar el día disfrutando de tiro con arco y paintball, quads y tiro al plato, ¡y mucho más! Todo ello antes de regresar al helicóptero y volar de vuelta a Liverpool.

Opciones para organizar un tour

Los habitantes de esta ciudad te dirán que conducir por la ciudad puede ser un verdadero fastidio, y aunque pasear por el centro y por el paseo marítimo es agradable, se necesita casi todo un día para ver todos los lugares de interés. La forma más eficaz y exclusiva de ver esta fantástica ciudad es en helicóptero. En sólo 20 minutos se puede dar una vuelta de 50 kilómetros por la zona, viajando a velocidades de más de 160 kilómetros por hora en algunas etapas y planeando como un colibrí en otras. La excursión termina con una copa de champán en tierra para celebrar el viaje.

Entendemos que algunas personas son nerviosas volando incluso en aeronaves conocidas, así que si es la primera vez que vuelas en helicóptero y no sabes qué esperar, podemos sugerirte que des una vuelta de 5 ó 10 minutos para cogerle el gusto. Incluso en ese corto espacio de tiempo disfrutará de unas vistas magníficas del horizonte de Liverpool y del río Mersey.

En el otro extremo del espectro están los temerarios que no se conforman con ser pasajeros. Pues bien, el aeropuerto John Lennon puede ser el escenario de tu primera experiencia de pilotaje, un vuelo de prueba en helicóptero. Puedes elegir entre 30 minutos o 1 hora de vuelo y tomar los mandos durante parte del mismo con la experta guía de un instructor piloto.

Requisitos para hacer esta actividad

Los vuelos de placer desde este aeropuerto se realizan en un helicóptero modelo Robin R44 de cuatro plazas. Se trata de una máquina fantástica con grandes ventanillas que permiten una observación aérea asombrosa, y lo que es más, cada uno de los 3 pasajeros tendrá un asiento en la ventanilla. Si vas a reservar una clase de prueba o bautismo de vuelo, también puedes elegir este helicóptero, u optar por un R22 más pequeño, o un Eurocopter EC120 más lujoso.

Puedes llevar a tu familia contigo, incluso a niños de 3 ó 4 años, siempre que sean lo bastante grandes para sentarse correctamente en uno de los asientos. Pero si sois un grupo de 3 adultos, tendréis que pensar en el peso. Como cualquier aeronave, tienen una capacidad de carga específica que no se puede sobrepasar y, si tenemos en cuenta la propia máquina, el combustible y el piloto, quedan unos 270 kilos para los pasajeros. Por eso, lo ideal es que todos los miembros del grupo pesen menos de 90 kilos.

Puede que tu nombre no sea Lucy, pero aquí puedes hacer un viaje por el cielo de diamantes. ¡Reserva hoy mismo!