Sheffield está situada en las faldas del Peak District, en el valle del río Don. Esta belleza natural se ha conservado en la planificación de la ciudad, con 250 parques y 4,5 millones de árboles dentro de sus límites. Pero cuando se trata de una experiencia de puenting sin igual, el telón de fondo no es el paisaje natural, sino su legado industrial.

En el suburbio de Templeborough se construyó una enorme acería cuando se convirtió en la capital mundial de la producción de acero. La estructura en forma de hangar de esta fábrica tenía más de un kilómetro y medio de largo y, en su mejor momento, contaba con más de 10.000 trabajadores y producía casi 2 millones de toneladas de acero al año. Este coloso siguió funcionando hasta la década de 1990 y, desde entonces, ha sido parcialmente utilizado para albergar un museo, Magna, y una experiencia que desafía a la muerte. Si quieres ponerte a prueba hasta el límite, no se nos ocurre una forma mejor que atreverte a hacer el único salto en bungee bajo techo del mundo.

¿Cómo es realizar esta experiencia?

Cuando piensas en puenting, probablemente te imaginas un cañón o un puente, con una caída al aire libre sobre un río o las copas de los árboles. Lo que tendrás en Sheffield es un ensueño post industrial steampunk: el vasto interior de una megafábrica, hielo seco flotante, focos, música tecno y pantallas digitales. Es aquí, en este entorno irreal, donde puedes subirte a una plataforma alta, con el corazón en la boca, y saltar al vacío, antes de que un cable elástico en la cintura o los tobillos detenga tu caída.

Para llegar a ese punto, te guiarán por el suelo semioscuro de la fábrica y por las escalerillas, pasando por viejas instalaciones y estructuras que quedan de sus días como una de las mayores plantas industriales. En la plataforma de salto se llevarán a cabo comprobaciones del equipo y de la seguridad, y luego sólo estarás tú, de pie sobre la oscuridad: por algo lo llaman El Abismo. ¿Eres lo suficientemente valiente como para tirarte al vacío?

Experiencias con las que se puede combinar

El complejo de Templeborough es enorme. Mientras que la experiencia de puenting de Sheffield ocupa una torre central, en el hangar hay mucho espacio para más aventuras. Las 4 actividades implican poner a prueba tu valor contra la gravedad, ya sea saltando, deslizándote o dejándote caer.

- Tirolina: cuando desmantelaron las antiguas acerías, parte de la maquinaria era demasiado grande y pesada para sacarla de la fábrica. También se puede dar un buen uso a estas reliquias, ¿no? Esto es lo que se ha hecho con una grúa de 100 toneladas y 22 metros de altura que sirve de punto de partida para una tirolina; el punto de llegada está a 76 metros. En tu descenso por el cable pasarás por viejas calderas que se utilizaban para el acero fundido, mientras tus amigos y familiares pueden seguir tu trayectoria desde una pasarela que recorre toda la línea. Puede que esto no requiera tanto valor como el salto en bungee, pero te dará una nueva perspectiva del trabajo en la fábrica. ¿Por qué no lo consideras como un calentamiento para el evento principal?

- Rappel: si te gustan las alturas, pero quieres tener más control que en el puenting, el rappel es para ti. En primer lugar, subirás los 150 pies de escaleras de acero hasta la plataforma, antes de empezar a bajar con cuerdas. Pero esto no es como el rappel que has visto en las montañas: no hay una pared de roca para apoyar los pies en esta actividad. Se trata de un rappel libre, en el que lo único que te mantiene en el aire es la cuerda.

- La experiencia de caída libre, The Drop: esta actividad única es similar al salto de bungee, pero sin nada a lo que estar colgado, como sucede después de haber saltado en el bungee, en el que quedas sujeto por el extremo de la cuerda. Para completar The Drop, te bajas de una plataforma alta y experimentas unos momentos de caída libre, lo que significa que la única fuerza que actuará sobre tu cuerpo es la de la gravedad, antes de que el sistema de cuerdas especialmente diseñado entre en acción y reduzca tu velocidad de forma rápida pero suave. En el momento en que la velocidad se detiene, ya estás a nivel del suelo y puedes alejarte tranquilamente de la zona de caída - ¡si tus rodillas no se han debilitado por la adrenalina!

El salto de puenting y las 3 actividades adicionales pueden comprarse individualmente, pero los temerarios que quieran probar más podrán ahorrar dinero comprando paquetes que incluyen varias actividades.

Requisitos par ahacer la actividad

Teniendo en cuenta los retos que supone realizar un salto de puenting en una antigua acería, no es de extrañar que haya algunas normas sobre quién puede saltar. En primer lugar, hay que tener 14 años. Se trata de una norma para todos en el Reino Unido y se basa en la idea de "participación informada": ¡hay que saber a qué te estás apuntando con este tipo de experiencias!

Las otras especificaciones se refieren a tu tipo de cuerpo. El equipo y las instalaciones de cualquier tipo de bungee jumping tienen que funcionar con márgenes de seguridad, y esto es quizás aún más importante en un espacio cerrado como el centro Magna de Sheffield. Por ello, debes pesar menos de 120 kg.. También llevarás un arnés de seguridad y éste te servirá si tienes una cintura de 40 cm. hasta 125cm. Así que comprueba la etiqueta de tus vaqueros antes de hacer la reserva.

¿Es segura esta experiencia?

En una palabra, sí. Cumple con la normativa del Reino Unido para garantizar que tu salto sea una experiencia segura y divertida. Estas normas regulan el equipo que utilizarás -incluyendo el arnés de cintura o de tobillo, las cuerdas y los accesorios- y exigen un sistema de redundancia, es decir, la presencia de sistemas de respaldo que significan que el fallo de una pieza del equipo no conlleva el fallo del conjunto. Todo esto significa que no hay que preocuparse por la seguridad, sino por tener el valor de saltar.

Imaginamos que querrás invitar a algunos amigos y familiares a verte saltar, para que tengan que creerte cuando hables de tu experiencia de desafío a la gravedad. Ten en cuenta que este salto tiene lugar en una fábrica en desuso en la ciudad norteña, por lo que deben vestirse adecuadamente. Los zapatos cerrados son imprescindibles, y no esperes que haya calefacción central en este vasto espacio. Lo mismo se aplica a ti, y aunque probablemente querrás quitártelo para el salto, ten algunas capas de abrigo contigo para antes y después.

No te lo pienses dos veces, ¡o podrías cambiar de opinión! Reserva hoy mismo y presume de ello el resto de tu vida.