¿Te gustan las aves? Los observadores de aves de East Sussex te dirán que las mejoras en las prácticas agrícolas y los proyectos de conservación del condado en los últimos años han hecho maravillas por las poblaciones de algunas de las aves rapaces más emblemáticas de Inglaterra. Ratoneros, cernícalos e incluso las aves más rápidas del mundo, los halcones peregrinos, tienen su hogar en el paisaje de esta región y surcan los cielos en busca de su próxima comida. Por este motivo, volar en parapente en esta parte del país, que ya era una aventura fantástica, es ahora una experiencia única. Unas vistas impresionantes se combinan con un aire de gran calidad, que disfrutarás junto a unas aves muy especiales.

Si te preocupa que volar en el mismo cielo que estas magníficas aves pueda molestarlas, podemos asegurarte que no hay ninguna posibilidad de que eso ocurra con esta actividad. Estas aeronaves carecen de motores ruidosos, gases de escape e incluso estructuras rígidas, por lo que planean por el aire sin dejar rastro. Y tú puedes dar un paseo en uno de ellos aquí mismo. Para deleitarse con la sensación del vuelo propulsado por el viento y disfrutar de la observación aérea y aviar, la mejor opción es un vuelo en tándem con un piloto experimentado. Si quieres pilotar un parapente tú mismo, ¡no hay problema! Hay cursos de vuelo disponibles. Por último, la popularidad de este deporte en este condado hace que haya varios proveedores compitiendo por su clientela, lo que le garantiza los mejores precios.

¿Dónde están los mejores sitios para volar en parapente en East Sussex?

• Brighton: Aunque se la conoce como London-by-the-Sea, sobrevolar Brighton es una experiencia muy distinta a la que supondría hacer un viaje por los cielos llenos de smog de Londres. Situada entre el mar y el Parque Nacional de South Downs, el aire es limpio y las vistas, impresionantes. La ciudad se extiende a lo largo de una amplia playa, intentando llegar al mar por el muelle Palace, mientras que tierra adentro, tras los elegantes edificios históricos y las calles comerciales de moda, las casas se aferran a las laderas de escarpadas colinas verdes. Son estas colinas y la proximidad al Canal de la Mancha lo que hacen de Brighton un lugar idóneo para tomar la brisa marina y surcar los cielos.

• Lewes: Cruzando las crestas y valles de los South Downs, se llega a la histórica ciudad de Lewes. Hay muchas zonas de despegue en el territorio y entre todas, suman casi todas direcciones, perfectas para atrapar el viento, venga del punto de la brújula que venga. El castillo de Lewes se construyó sobre un promontorio en el centro de la ciudad para que los soldados pudieran vigilar la campiña circundante, pero tú puedes hacerlo mejor volando más alto que las torres más altas. Las vistas de 360º de la zona, y los vistazos al interior del propio castillo, son la recompensa por atreverte a volar hasta aquí.

• Beachy Head: Una de las experiencias más impactantes que se pueden vivir como piloto de parapente es despegar desde lo alto de un acantilado y elevarse sobre el océano. Y esa sensación de asombro se magnifica cuando se hace en el acantilado de creta más alto del país. La blanca pared rocosa de Beachy Head tiene más de 150 metros de altura y se adentra en el Canal de la Mancha por encima de la localidad costera de Eastbourne. Justo alrededor del promontorio se encuentran las famosas Siete Hermanas, una serie de acantilados rocosos que, aunque no son tan altos como Beachy Head, forman un impresionante panorama costero.

• Devil's Dyke y Ditchling Beacon: Son dos de los accidentes más espectaculares del Parque Nacional de South Downs. Devil's Dyke es un abrupto valle que atraviesa la cresta, supuestamente construido por el diablo, y Ditchling Beacon es un pico que casi alcanza los 250 metros sobre el nivel del mar. Volando desde las laderas de cualquiera de estos lugares, podrás gozar de vistas del océano en una dirección y del interior a través de la campiña de Sussex hasta el High Weald en la otra. Y lo mejor es que no tendrás que compartir el mirador con multitudes de turistas cuando estés suspendido en el aire.

¿Cuáles son las mejores formas de experimentar esta aventura?

- ¿No es asombroso pensar que la fuerza del viento es suficiente para dar a un ala de parapente la sustentación suficiente para llevar a una persona por los aires? Bueno, es incluso más impresionante que eso, porque son capaces de soportar vuelos en tándem, es decir, vuelos con dos personas en la embarcación. Una de esas personas será un piloto entrenado, que sabe cómo elegir un lugar de despegue, preparar el equipo y ponerse en el aire. La otra persona serás tú. Un vuelo en tándem suele durar entre 20 y 45 minutos, dependiendo de las condiciones del día de tu vuelo, y, viajando a varios cientos de metros de altura y a velocidades de hasta 32 kilómetros por hora, obtendrás una visión completa de la zona.

- Para los verdaderos aventureros, los vuelos campo a través son una opción, que pueden durar una hora o más y llevarte de un lado a otro del condado. Una parte extra del servicio si eliges esta opción es el transporte que te encontrará al final de tu viaje y te llevará de vuelta al lugar de despegue.

- Pero por muy alto o lejos que vueles como pasajero, sabemos que hay algunas personas que no estarán satisfechas hasta que puedan volar individualmente. Si eres una de esas personas, tendrás que apuntarte a un curso. Hay varias escuelas de parapente que ofrecen cursos de formación, desde cursos de prueba de 1 día hasta programas que abarcan varios días y pueden culminar en un certificado de piloto.

Requisitos para hacer esta actividad

Es un deporte aéreo para todo el mundo. No es necesario tener una gran forma física para ser pasajero en un vuelo en tándem; si eres capaz de caminar cuesta arriba hasta el lugar de despegue y dar un par de pasos rápidos de vuelta hacia abajo mientras tu piloto coge el viento en el ala, estás listo para volar. Cada piloto tendrá sus propias restricciones en cuanto a los grupos de edad a los que llevará a los cielos, pero en East Sussex se pueden encontrar experiencias para mayores de 12 años.

En cuanto al peso, los límites son un poco más estrictos. Debido a la física del vuelo, las alas de parapente más grandes pueden levantar un máximo de 250 kilogramos. Esa cantidad se reparte entre piloto y pasajero, por lo que podrás volar si pesas hasta 125 kilos. Sin embargo, si pesas más de 100 kilos, deberías ponerte en contacto con el proveedor de la actividad antes del día del vuelo para asegurarte de que el vuelo será posible.

¿Cómo se puede complementar un salto?

Para convertir un vuelo corto en un recuerdo que pueda volver a visitar una y otra vez, tiene que organizar la instalación de una cámara en el artefacto y capturar la experiencia. No podrás grabarte a ti mismo, ni hacer fotos de forma efectiva, durante el vuelo porque tendrás las manos ocupadas, así que esta es la mejor forma de obtener un registro visual de las vistas de la región para enseñárselo a tus amigos durante años. Incluso puedes pedir que editen la grabación y le pongan la banda sonora que tú elijas para tener un recuerdo digno de la gran pantalla.

El poder del vuelo está en tus manos, ¡no dudes en organizar tu aventura aérea!