La capital del Gran Manchester es famosa por haberse convertido en la primera ciudad industrializada del mundo, con su emblema de abeja obrera que simboliza el trabajo duro y la cooperación de sus ciudadanos, pero eso no significa que no se pueda salir al aire libre en el condado. Al igual que las abejas, necesitamos pasar tiempo en la naturaleza con plantas, flores y cielos abiertos, y de todas las actividades que se pueden elegir al aire libre, una de las mejores tiene que ser el tiro al plato. No estamos hablando de nuestros amigos emplumados que comparten las calles de nuestra ciudad, de hecho, ningún animal es dañado en la realización de este deporte. Las dianas son discos de arcilla giratorios que imitan el vuelo de las palomas y otras aves reales, dándote un objetivo en movimiento al que disparar. Tendrás que sacar el Wayne Rooney que llevas dentro para apuntar y acertar.

En armonía con la personalidad innovadora de Manchester, el tiro al plato es una solución tecnológica a los problemas de la caza, que consisten en que la mayoría de la gente prefiere no disparar a pájaros reales y, además, sólo se puede ir a cazar en determinadas épocas del año. Las arcillas se lanzan al aire mediante una máquina llamada trampa. Sólo hay que cargarla con tantas como se quiera disparar, y ella hace el resto. Mientras vuela por el aire, hay que concentrar la atención, ralentizar la respiración y mantener la mano firme si quieres dar en el blanco, y la recompensa si lo consigues es un gratificante impacto. Esta combinación de concentración y euforia es lo que atrae cada vez a más gente a este deporte, y el coste y los niveles de habilidad para participar son más bajos que nunca.

¿Qué tipo de experiencias de tiro al plato se ofrecen en Gran Manchester?

• Eccles: En Eccles, no muy lejos de la ciudad de Salford se encuentra un campo muy recomendable, situado en 400 acres de tranquilos bosques. Aquí se ofrece una amplia gama de actividades de tiro, desde clases individuales para todos los niveles hasta jornadas corporativas. Incluso puedes participar en un Tiro Simulado, que te lleva fuera del campo de tiro a la caza de arcillas salvajes que vuelan. Sea cual sea tu elección, los expertos instructores te harán disparar a las arcillas en un abrir y cerrar de ojos.

• Bolton: Según una investigación reciente, los habitantes de Bolton son las personas más amistosas del país, así que puedes esperar una cálida bienvenida en el club de tiro. Los miembros de este club siempre están dispuestos a compartir su entusiasmo con los tiradores noveles o con las personas con experiencia que quieren disfrutar del tiro en un campo nuevo.

• Astley: Situado entre Manchester y Wigan, Astley es un pequeño pueblo en el canal de Bridgewater. Aquí encontrarás un club de primer nivel con un equipo de miembros dedicados y oportunidades para que los recién llegados a este deporte se inicien en este deporte o se inscriban en clases. También organizan eventos corporativos, que son una forma estupenda de recompensar a tu equipo por su buen trabajo, o de animar un poco la dinámica de la oficina.

• Oldham: Al otro lado del condado, pasando por Oldham, se llega a Saddleworth. Se trata de un distrito rural al borde del Peak District, un paraíso al aire libre que está engañosamente cerca del centro de la ciudad. Es un lugar estupendo para practicar este tradicional deporte, especialmente para los tiradores experimentados que quieran probar algunos trazados de tiro innovadores en un entorno precioso. Los principiantes también pueden participar, ya que es posible organizar una sesión corporativa con el club, pero ten cuidado: si haces tus primeros disparos aquí, es probable que te enganches.

Requisitos para hacer esta actividad

El tiro al plato se lleva a cabo en condiciones controladas con la supervisión de un instructor capacitado, por lo que no se necesita una licencia para participar en este deporte en Greater Manchester o en todo el país. Tampoco es necesario que haya disparado o tocado un arma antes, porque el mismo instructor que te mantiene a salvo te ayudará a hacer tus primeros disparos y se asegurará de que te diviertas; al fin y al cabo, quieren que vuelvas a por más.

Y no dejes que las armas te impidan llevar a los niños. La concentración y la disciplina hacen que sea una actividad saludable para los más jóvenes, que son bienvenidos a realizar sus primeros disparos. Las armas en cuestión son escopetas, que en general son bastante grandes y pueden producir un retroceso al disparar, por lo que, dependiendo del equipo disponible en el campo de tiro, será necesario tener al menos 10 años, y a veces más, para participar en una tirada.

La mejor manera de disfrutarlo es con tu gente. La competición amistosa siempre saca lo mejor de la gente, y si todos los miembros del grupo prueban este deporte por primera vez, todos están en igualdad de condiciones. A diferencia de otros deportes de tiro, este implica que varios participantes disparen al mismo blanco con pocos segundos de diferencia, lo que hace que todos se sientan involucrados y ayuda a desarrollar el espíritu de equipo. Por eso se está convirtiendo en una de las principales opciones para las salidas de formación de equipos corporativos, y muchos campos aquí ofrecen a los grupos de trabajo una variedad de paquetes que incluyen tiro, comida y refrescos, e incluso premios.

¿Cuánto dura esta experiencia?

Una de las cosas buenas es que no estás bajo el control del reloj. En lugar de esto, la forma más común de organizar una tirada es por el número de platos que se cargan en la trampa. Una sesión de tiro suele constar de 25 platos, y se puede tardar media hora en hacerlo, y siempre puedes volver a comprar más si quieres prolongar tu experiencia. Muchos clubes del área metropolitana ofrecen clases individuales, y si ya has probado y quieres dar el siguiente paso en este deporte, ésta es la mejor manera de hacerlo. Estos cursos sí se organizan por tiempo, normalmente una hora u hora y media, en la que podrás disparar a un montón de arcillas y, con la ayuda de tu instructor, hacer añicos un buen número de ellas.

La duración de una sesión para empresas se puede negociar. Depende del tiempo del que dispongáis tú y tu equipo, y de lo que queráis obtener de la experiencia. Una sesión corta de 45 minutos o una hora de duración puede ser una forma estupenda de desahogarse, pero si el objetivo es que todos trabajen juntos y disfruten de la compañía de los demás, te sugerimos que dediques 3 o 4 horas -medio día de trabajo- para invertir en la fuerza de tu equipo.

Si esto no es suficiente para convencerte de que hagas una reserva, sólo tienes que decirnos qué es lo que te frena y podremos despejar cualquier duda.