Ofertas de Coasteering Bude

Para algunos, tumbarse en la arena al sol es todo un sueño, pero a otros les gusta disfrutar un poco más de un día de playa. Jugar con las olas, trepar por las rocas, explorar las pozas escondidas que se llenan con la marea e intentar resistir el impulso de escalar los acantilados, para no perder la oportunidad de tomar un helado con el resto de la familia. Pero ahora es nuestra oportunidad de dejar atrás a los bañistas y dar rienda suelta a nuestra pasión por explorar, lejos de las multitudes y a lo largo de la costa. Hablamos del coasteering, la actividad de aventura que te lleva al aire libre... y bajo el agua. Bude es una localidad costera de Cornualles que cuenta tanto con hermosas playas como con una escarpada costa para hacer realidad los sueños de cualquiera.

Situada en la costa norte de Cornualles, Bude es un lugar maravilloso para unas vacaciones en la playa. La playa de Summerleaze es una extensión de arena dorada donde puedes meterte en las olas para nadar o disfrutar de la Piscina Marina, que se llena de agua fresca cada vez que sube la marea. También está orientada al oeste, lo que significa que el oleaje del Océano Atlántico proporciona una sucesión fiable de olas que pueden disfrutar los surfistas, los que practican stand up paddleboard y los kayakistas de mar. Hay monumentos históricos y naturales a lo largo de la costa y en el interior, y una activa vida nocturna de la que disfrutar por las noches. Pero son las oportunidades de practicar coasteering cerca de la ciudad las que la convierten en un destino único. Bahías, playas, acantilados y formaciones rocosas al norte y al sur hacen de éste un paisaje dinámico, modelado por la fuerza de las olas y las mareas, que tiene tanta variedad que nunca podrías explorarlo todo. Pero el coasteering es sin duda la mejor manera de empezar, y vamos a contarte por qué.

¿Dónde están los mejores sitios para hacer coasteering en los alrededores de Bude?

• Bahía de Sandymouth: Es una de las playas más grandes y, como su nombre indica, más arenosas de la zona. Cuando la marea está baja, no se notan tanto los acantilados y los afloramientos rocosos como la amplia extensión de arena, pero cuando sube la marea cubre la arena y crea un laberinto de islotes rocosos y pozas. Es un lugar estupendo para explorar, donde puedes evitar el agua si quieres, o jugar con las olas, y las piscinas rocosas están llenas de vida vegetal y animal.

• Tintagel: Lugar de nacimiento del mítico Rey Arturo, Tintagel es conocido como el pueblo de la montaña en la antigua lengua de Cornualles. Es un lugar realmente mágico, donde las ruinas de un castillo se asientan sobre un dramático promontorio de los acantilados sobre el océano Atlántico. Al pie de los acantilados se encuentra la Cueva de Merlín, una gruta marina de 100 metros de largo que atraviesa el promontorio de una cala a otra.

• Cala Bossiney: Este refugio se encuentra bajo el cabo de Tintagel, excavado en los acantilados. Es una parte salvaje de la costa, pero es uno de los lugares favoritos de los aficionados al coasteering de Cornualles por las formaciones que las olas han esculpido en el paisaje. Una de ellas es la Roca del Elefante, un tronco rocoso separado por un estrecho arco en el límite de los acantilados. También está Lye Rock, que se separa de la tierra con la marea alta y ha sido escenario de varios naufragios, y Las Hermanas, dos pináculos rocosos gemelos que sobresalen del agua más mar adentro. Alrededor de estos hitos hay acantilados para escalar y plataformas desde las que puedes saltar para zambullirte en las aguas que hay debajo.

• Puerto Gaverne: Un poco más alejado de la costa, Port Gaverne es un pequeño pueblo con una estrecha playa flanqueada por altos acantilados. Se trata de un destino de coasteering infinitamente gratificante, ya que el paisaje y la personalidad de la zona cambian con las mareas. Dependiendo del estado de la marea y de la fuerza de las olas, en este mismo lugar se pueden vivir decenas de aventuras completamente únicas.

Requisitos para hacer esta actividad

La costa es uno de los entornos más variados y dinámicos. Si las mareas están subiendo o bajando, si el mar está en calma o agitado, un viento costero o marino, y por no hablar de donde optas por ir, hay muchos factores que determinan lo difícil que será una ruta de coasteering. Esencialmente, esto significa que habrá algo para el recién llegado más nervioso hasta el explorador más atrevido en los alrededores de Bude. Por supuesto, es necesario sentirse cómodo en el agua, y algunos operadores exigen saber nadar entre 25 y 50 metros, pero no es necesario tener experiencia o formación para participar.

También puedes llevarte a la familia contigo en una expedición por la costa. Dependiendo de las condiciones, niños de tan sólo 10 años pueden participar en el coasteering, aunque hay algunos lugares cerca de Bude que sólo son aptos para adolescentes y adultos. Y si no estás en Cornualles con la familia sino, por ejemplo, con tus mejores amigos o tus colegas en un retiro de empresa, el coasteering es una forma ideal de ofrecer a todos una experiencia que no olvidarán.

¿Cuánto dura esta experiencia?

No hay dos excursiones de coasteering iguales, por lo que, una vez más, depende de ti cuánto tiempo quieres estar escalando, saltando y nadando a lo largo de la costa. Las rutas más cortas duran unas 2 horas, y 3 horas es una duración habitual, pero si te apetece, también puedes organizar una excursión de un día entero para descubrir de verdad la costa norte de Cornualles.

¿Qué hay que llevar a una excursión?

En lo que respecta a los deportes acuáticos, el coasteering requiere muy poco equipo especializado. No necesitas una tabla ni una embarcación para esta actividad, ya que utilizas tu cuerpo para desplazarte por el paisaje acuático. Pero, como entrarás en contacto con el agua y las rocas, necesitarás algo de equipo para protegerte. La buena noticia es que todo esto te lo proporcionarán tus guías de coasteering en Bude. Te equiparán con un traje de neopreno, un casco y un chaleco salvavidas de tu talla para que no tengas que preocuparte por el frío o los moratones y puedas concentrarte en la diversión.

Hay un par de cosas que los guías no pueden darte, así que asegúrate de llegar a tu experiencia en Bude con lo siguiente: un bañador para ponerte debajo del traje de neopreno, un par de zapatillas viejas con cordones que te den agarre incluso cuando estén mojadas y (lo más importante) una toalla y algo de ropa seca para ponerte después.

No volverás a mirar una playa después de divertirte tanto en las rocas y pozas de la costa de esta ciudad. ¡Estamos listos y esperando para hacer realidad esta aventura para ti!