No hay mejor forma de experimentar una paz y tranquilidad absolutas que deslizándote por aguas tranquilas en un paisaje verde y virgen. Para lograr esta sensación, necesitas dos cosas: una embarcación y un lugar. Caracterizadas por su sencillez, estilo y una conexión atemporal con nuestros antepasados, las canoas son una forma maravillosa de lanzarse al agua y empezar a explorar. Son embarcaciones largas y abiertas, puntiagudas en ambos extremos, impulsadas por una o varias personas con remos de una sola hoja. Su silencioso paso por el agua sólo se ve interrumpido por el sonido del remo al entrar en el agua en cada remada, lo que crea las condiciones perfectas para relajarse y contemplar la naturaleza. Y hablando del entorno natural elegido para una expedición en canoa, los paisajes más bellos, remotos y variados de las Islas Británicas se encuentran en Escocia. Ríos, lagos, canales, brazos de mar y cualquier otra masa de agua que se te ocurra es tuya para disfrutar en esta impresionante parte del mundo, donde el terreno escarpado se alterna con aguas tranquilas: una receta para vivir una experiencia que te cambiará la vida.

¿Dónde están los mejores sitios para hacer una excursión en canoa en Escocia?

• Sur: El emperador romano Adriano definió la frontera entre su tierra y la de Escocia hace casi 2.000 años, y el muro fronterizo aún puede verse atravesando el país. En el lado escocés del Muro de Adriano se encuentra la frontera actual: el río Tweed. Es un lugar fantástico para navegar con la corriente, con vistas de distintos países en cada orilla. Al norte de la frontera, hay lagos que también son excelentes para ir en canoa, como St Mary's Loch, cerca de la ciudad de Peebles, y varios en Galloway, entre ellos Loch Doon.

• Cinturón Central: La inmensa mayoría de la población escocesa vive en esta región central entre los estuarios de Clyde y Forth, por lo que no es de extrañar que aquí haya aficionados que hayan encontrado algunos lugares estupendos para practicar su pasión. Desde Edimburgo no hay que ir muy lejos para practicarlo: el Union Canal y el embalse de Gladhouse son masas de agua artificiales que garantizan un agradable remo, mientras que numerosos lugares a lo largo de la ribera del Forth -el puerto de Cammond, las lagunas de Musselburgh, la playa de Portobello y South Queensferry, por nombrar algunos- son ideales también. Al otro lado del Forth, el río Devon es otra gran opción. En la mayor ciudad de Escocia, Glasgow, puedes practicar este deporte en un entorno urbano, en el centro de deportes acuáticos Pinkston. Dispone de aguas tranquilas para disfrutar de la paz y la práctica, y de una instalación de aguas bravas especialmente construida para vivir una aventura húmeda y salvaje.

• Loch Lomond: Se trata de uno de los destinos más populares para el turismo al aire libre en el Reino Unido, y las aguas abiertas de Loch Lomond, rodeadas de montañas y cañadas, son el centro del mismo. El canotaje es aquí una actividad obligada, pero no la única opción. Los ríos Endrick y Teith desembocan en el Parque Nacional de Loch Lomond y los Trossachs, y puedes seguir su recorrido hasta esta maravilla natural.

• Argyll: Más allá de Loch Lomond, un estrecho brazo de mar conocido como Loch Fyne separa la península de Kintyre, de 48 kilómetros de largo, de tierra firme. La parte protegida de esta lengua de tierra es fantástica para explorar, al igual que la parte que da al mar cuando las condiciones son adecuadas. Si sacas tu canoa del agua aquí podrás disfrutar de vistas de las islas de Islay y Jura, e incluso de la costa norirlandesa en un día despejado.

• Noreste: La zona que va desde el estuario del Forth hasta Moray es una mezcla de tierras altas y bajas. Los lagos que se asientan en valles altos, como Loch Tay y Loch Insh en el Parque Nacional de los Cairngorms, permiten practicar la navegación tranquila en canoa con vistas a las montañas, mientras que los ríos que los conectan con el mar, como los ríos Tay y Spey, pueden llevarte en un suave descenso hasta las tierras bajas. Hay otras pozas y canales que explorar aquí, el río Findhorn, que desemboca en el estuario de Moray, y la laguna de Willowgate, cerca de la desembocadura del río Tay.

• Las Highlands: Las montañas más altas de las Islas Británicas son el rasgo más emblemático de las Highlands, pero no serían nada sin el agua que modela el paisaje, separando picos y valles y formando cadenas de islas. El Great Glen es un valle que atraviesa el país desde Fort William hasta Inverness, y acuna varios lagos maravillosos para pasear en canoa: Lochs Oich y Lochy, por ejemplo. Están conectados por ríos y un canal artificial, el Canal de Caledonia. Después de Fort William, el mejor campamento base para los canoístas es Lairg, a orillas del Loch Shin. El Kyle of Sutherland es un largo y estrecho estuario, donde gran parte de la lluvia que cae en las zonas más septentrionales del país desagua en el mar.

¿Qué opciones hay para organizar una excursión?

Las sesiones o clases cortas de una hora o dos son una forma estupenda de iniciarte en este mundo si no has probado nunca. En particular, un pequeño loch o embalse en tierra firme escocesa, con aguas tranquilas y protegidas, es perfecto para familiarizarte con la embarcación y aprender la técnica. Pero la mejor forma de disfrutar de las canoas, de hecho, el propósito para el que fueron diseñadas, es una excursión que dura medio día o un día entero - o incluso varios días. Hacer un recorrido por un río, por un sistema lacustre o por la costa es una experiencia sin igual, en la que el paisaje siempre cambiante se revela a cada remada. Puedes llevar provisiones en el casco, hacer descansos en playas e islas, y conectar contigo mismo y con la naturaleza de una forma que no sabías que era posible. Una excursión organizada es la opción ideal si quieres asegurarte de ver lo mejor que Escocia tiene que ofrecer, pero también puedes alquilar canoas y encontrar tu propia ruta, si sabes usar una.

Requisitos para hacer esta actividad

A diferencia del remo, que implica una coordinación bastante compleja y mirar en dirección contraria a donde se va, remar en una canoa es una habilidad que se adquiere rápidamente, por lo que incluso los principiantes podrán desplazarse por las vías navegables escocesas con sólo un poco de instrucción. Otra ventaja de este tipo de embarcación es que existen las individuales junto a embarcaciones más grandes para dos o incluso más personas. Esto significa que se pueden unir novatos con expertos y que todos sacarán el máximo partido a la experiencia. Por supuesto, también significa que puedes llevarte a los niños, a partir de 5 años, en un viaje de descubrimiento que les dará que hablar durante semanas.

¡Ven a probarlo!